Me apasiona la estética de estos enseres de cocina de aluminio, que son ya parte de nuestra historia… y en esta ocasión he retratado esta lechera que sabe dios los años que tiene. Me la dejo Meli, una vecina y ante todo amiga cordobesa con mucho arte y mucha sabiduría, que le apasiona mi fotografía.
La coloqué junto a un vaso de leche, que era todo lo que necesitaba para realizar la composición que había diseñado, y una longitud de focal amplia, use un 18 mm. (27 mm en full Frame). Para llevar a cabo mi idea, me debía acercar todo lo que me fuera posible a la composición, con lo que opte por usar enfoque manual y un diafragma muy cerrado para asegurar una mayor profundidad de capo.